¿Se han detenido a pensar en que literalmente tenemos el mundo en nuestras manos?, ¿Son conscientes de que con nuestras acciones tenemos el poder de construir, pero también de destruir? Ante estas dos posibilidades ¿Qué han elegido ustedes? ¿Están usando sus manos para construir o para destruir? ¿Están plantando árboles o deforestando? ¿Están integrando a su día a día el reciclaje y reusando todo lo que puedan o son de los que producen y producen desperdicios sin consideración? ¿Son de los que cierran la llave por conciencia o de los que olvidan que estamos en crisis porque aún sigue saliendo agua por el grifo? ¿Se han detenido a pensar si lo que hacen ayuda o destruye el planeta en el que vivimos?
Soy Raquel y más que cuestionarlos busco contagiarlos del inmenso deseo de proteger nuestro planeta que invade mi corazón desde el momento en que tuve la oportunidad de tomar consciencia de cuán dañinos podemos llegar a ser los seres humanos ante los recursos que de manera generosa la Madre Naturaleza ha puesto a nuestra disposición. Deseo, con todo mi ser, que accionemos por la protección y uso adecuado de lo que todavía nos queda, pues de seguir como vamos, el Planeta Tierra, la casa de todos, nuestra Casa Grande, va a colapsar.
Frenemos este caos, sin lugar a dudas nosotros estamos inconscientemente desatando una catástrofe descomunal. Por lo que vuelvo a preguntar: ¿Seguiremos sin freno junto a aquellos que están provocando este triste final o nos uniremos, haciendo todo lo que podamos para darle un giro más esperanzador a nuestro futuro y garantizar de este modo la vida de nuestro planeta y, con la del planeta la nuestra? Confío en que sabremos con conciencia accionar y ser defensores de la única verdad: la naturaleza agoniza y la debemos de rescatar y salvar. Ese es mi ferviente deseo, espero que también sea el de ustedes ¡Apuesto a eso!
Nota: Raquel es un personaje del cuento: “Un abrazo a la naturaleza”, contenido en el libro de cuentos infantiles “Seis gotitas de imaginación” de la autoría de María Cristina Espinal.
0 comentarios