(25 de diciembre de 2021)
Anoche me pusieron bajo el árbol de navidad un regalo especial. Al destaparlo, rebosante de curiosidad, me llené de sueños. Te recibí a ti, mi querido diario, y te tomé como el mejor presente, más en un día tan importante, el día en que conmemoramos el nacimiento de Jesús en nuestros corazones.
Así como permito que él nazca cada día en mi vida, prometo que nacerá cada mañana, con el sol, una oportunidad de aprovechar a plenitud la dicha de existir y de poder compartir tiempo de calidad con todos los que me rodean. Tú guardarás esos momentos para que sean verdaderamente inolvidables.
Estoy pensando cómo llamarte. Debo ponerte un nombre tan especial como tú y relacionado a la gran misión que tendrás en mi vida, la de ayudarme a reflexionar sobre mis acciones cuando registre en ti algo importante de cada día.
Prometo contarte las cosas que me transcurran: mis sueños, mis rutinas, mis proyectos, así como también mis miedos. En fin, prometo ser transparente ante ti, como quiero serlo ante los demás. Por eso, no negaré a los otros la oportunidad de leerte, porque, como quiero practicar la transparencia en mi vida, tú representas un medio perfecto para lograrlo.
Sé que lo que hacemos por el bien de los otros no debemos pregonarlo, pero te lo contaré a ti, mi querido diario. Tú guardarás mis secretos hasta que haya un lector interesado en descubrir tu contenido.
Rezo porque nuestra amistad sea fuerte y duradera para que seas testigo del recorrido de mi vida, que aspiro a que sea larga, dichosa y de crecimiento en todos los sentidos.
Seremos inseparables,
¡Te doy un abrazo grande de bienvenida!
Con amor,
Alondra
Miayu, el diario de Alondra
La imagen fue tomada de: Dibujos Vectores por Vecteezy